La ubicación es increíblemente conveniente, justo

a un breve paseo de la plaza principal y con un ambiente muy acogedor. El personal fue sumamente amable, ayudándonos a organizarnos y ofreció té marroquí al llegar. A pesar de lo hermoso del lugar, la señal de WiFi podía ser inestable en algunas áreas.

El lugar tiene una ambientación mágica y está cerca de la plaza principal, lo que lo hace accesible a diversos puntos de interés. Las habitaciones son realmente acogedoras y están decoradas con un toque local que te hace sentir en casa. Además, el personal es atento y siempre está dispuesto a ayudar en lo que necesites.

Sin embargo, la habitación puede ser algo ruidosa, especialmente con el paso de otros huéspedes.

El desayuno en la azotea fue una delicia.

edificio con encanto, iluminación agradable, tranquilidad para descansar

Es incómodo no poder entrar al alojamiento después de la 1:00 am, ¡algo que nunca había experimentado!!! Además, los problemas con el pago en tarjeta fueron frustrantes, obligándonos a buscar efectivo en un momento estresante.

El lugar tiene un ambiente encantador con una decoración que realmente te hace sentir en casa. La habitación era amplia y muy acogedora, perfecta para descansar después de un día explorando Marrakeck. Me encantó la azotea donde se servía el desayuno. el sabor de la comida era delicioso y tener esa vista era un plus. La ubicación también es excelente, a solo unos minutos de la plaza principal, lo que facilita el acceso a los puntos de interés.

Sin embargo, la entrada al riad puede ser complicada por los callejones estrechos, lo que puede ser estresante si llegas tarde. Además, me parecieron un poco limitados los horarios de acceso, ya que no permitir poder volver después de la 1:00 am es inusual y un poco incómodo.

experiencia muy agradable pero con detalles a mejorar

El riad es realmente un lugar encantador. La habitación era un refugio decorado con elegancia, y al entrar, los pétalos de rosa le dieron un toque especial. El personal se mostró siempre atento y servicial, lo que hizo que nuestra estancia fuera más placentera.

Sin embargo, es importante mencionar que el acceso al riad puede ser complicado por las calles estrechas.

Recomendado para parejas en busca de un refugio especial

El lugar es una joya, el desayuno en la azotea era increíble, había tanta variedad que nunca te aburrías. Además, el personal fue sumamente amable, una vez nos sirvieron té marroquí en la terraza mientras disfrutábamos la vista y charlábamos, ese momento fue realmente memorable.

No fue barato, pero realmente valió la pena.

La estancia fue agradable. Las habitaciones son amplias, decoradas al estilo marroquí y dan al patio central con vista a la piscina. El desayuno en la azotea fue un buen inicio del día. El personal fue servicial y me ayudaron incluso a conseguir una tarjeta de móvil. Como amante de la buena cocina, el restaurante destacó por ofrecer platos tradicionales. Fue tranquilo después de explorar la ciudad.

El acceso al riad puede ser complicado y la señal de WiFi no es fiable en algunas zonas. Las almohadas no fueron cómodas.

la decoración es espectacular y la ubicación, a solo minutos de la plaza principal, es perfecta. el ambiente es tranquilo y relajante, ideal para descansar después de explorar marrakech.

el desayuno no tenía suficiente variedad.

El lugar es impresionante, con un diseño encantador y con un ambiente mágico. Nos encantó la piscina y la decoración en cada esquina. Además, bajamos a explorar las zonas cercanas como las curtidurías, que son una experiencia única. Mi familia y yo lo disfrutamos mucho.

Mi mujer dice que el desayuno podría mejorar en variedad. Aunque fue rico, se notó un poco la repetición de opciones. Para los padres de familia estaría bien tener más alternativas para los niños.

La habitación era amplia y luminosa, muy agradable. La ubicación es excelente, cerca de una plaza y en una zona tranquila. Sin embargo, el acceso al lugar puede ser complicado debido a las calles estrechas. Además, el personal, aunque amable, podría haber sido más proactivo en atender nuestras necesidades. Los pasteles de crema del desayuno fueron un verdadero deleite.

El Riad tiene una decoración encantadora, pero la salida fue estresante por problemas de pago.

Impecablemente limpio y atención sumamente amable con un servicio lleno de detalles encantadores.

El patio de la piscina es hermoso y cerca de la plaza. El Wi-Fi no siempre funcionó.

El Riad tiene un ambiente mágico, con un diseño increíble que lo hace sentir especial. Me encantó la tranquilidad que se respira en el lugar después de un día explorando Marrakech, con la famosa Jemaa el-Fnaa a solo unos minutos caminando. Sin embargo, el desayuno podría ser mejor, ya que la variedad y frescura de los alimentos no cumplió con mis expectativas.